Texto que nació hace tiempo, al leer el nick del messenger de alguien con quien no hablo
Como no se que darte, pienso darte algo bonito, como la nota de una cuerda de violín o el primer paso de un baile sencillo.
Te puedo dar un día que no haya mucho calor, o una de mis sonrisas.
No se que darte, así que pienso darte algo mágico, como el instante en el que los dos pensamos lo mismo, o como las palabras que nos adivinamos por que no queremos decírnoslas.
No se que darte, y quiero darte algo inolvidable, como la primera desnudez o el primer contacto de los órganos húmedos.
Como no se que darte, pienso darte algo permanente, como el ciclo de la luna, el mar o la tristeza.
En verdad no se que darte, así que pienso darte algo que te guste, como un capricho de Paganini, o una frase padre de Eco. Mi blusa roja puesta en tu cumpleaños o un abrazo. Un roce de la piel. Puedo darte la emoción adolescente de marcar y colgarte. La letra fácil de una canción más bien cursi. Puedo darte una metáfora, la más tierna que se me ocurra.
No se que darte, pero puedo darte, darte de mí, de lo que no tengo. Puedo darle a mi corazón tu compañía. Puedo regalarte mi ausencia, si quieres.